EDUCACIÓN INFANTIL
!BIENVENIDOS A ESTE BLOG!
Este blog va dirigido a los niños/as
y a las familias, con la intención de compartir y hacer partícipes de las experiencias vividas de vuestros hijos/as en el aula.
El cangrejo ermitaño tiene un abdomen sin exoesqueleto, es decir,
decalcificado y por lo tanto blando. Por ello es muy vulnerable ante los
depredadores y esto lo obliga a buscar refugio y defensa en las conchas
vacías de los moluscos. Cuando encuentra una, introduce su cuerpo de
tal manera que pueda retraerse en él y sostenerla con la parte superior
de su cuerpo al caminar. A medida que el cangrejo aumenta su tamaño
abandona la concha y busca otra más grande. Algunas especies de cangrejo
ermitaño pueden utilizar corales, madera o piedras en vez de concha.”
Por si no quedaba claro qué es un cangrejo ermitaño...😁
Pero
Alejo no es como los demás. No, no... él busca una caracola nueva y
especial. Así que se pone pinzas a la obra y recorre la playa
encontrando objetos de lo más variopintos. Porque como os podréis
imaginar, la playa está llena de basuras, envases, y objetos rotos que
alguien sin conciencia ni miramientos ha tirado al mar.
Alicia
hace hincapié en el cuidado del medio ambiente mostrando toda clase de
residuos que se pueden encontrar en la playa, pero como ella lo sabe
hacer muy bien: con humor.
Y es que cada “casa” nueva que Alejo encuentra es más rara y
curiosa. Él es muy enamoradizo, y a primera vista ¡Ay! Sus ojitos se
vuelven corazones y con una estructura repetitiva dice aquello de: “¡Oh,
qué espaciosa, qué redondeces y qué vistosos colores!”
Pero
eso no es todo. Este álbum lo tiene todo: Humor, concienciación,
repetición y ¡acumulación! Sí, esa estructura acumulativa que nos
encanta para contar a los peques (se nota que la autora saca la
cuentista que lleva dentro cuando escribe sus historias).
Una
curiosa estructura acumulativa con toques vegetales, que hacen que los
ojos del cangrejo se vuelvan como espinacas, las pinzas como
lombardas... y hace que los pinceles de Poly Bernatene nos dibujen a un
cangrejo que se vuelve un divertido vegetal por un momento.
Y
es que las ilustraciones son divertidísimas, expresivas, coloridas... y
¡Frikis! Sí, sí, hay cabida para todo... Que levante la mano quien
leyendo el cuento ha dicho aquello de: “Yo soy tu padre”...🙋🏻♀️ y ya
con las guardas... ejem... me huele a fan de star wars a distanciaaaa ❤️
Todos
los animales marinos se ríen del pobre alejo por cada casa que
encuentra. ¡Jo, jo, jo! Se ríe la morsa. ¡Jugl, jugl, jugl! la ballena,
¡ji,ji,ji! Los percebes... pero Alejo no se da por vencido.
Y es que cada “casa” nueva que Alejo encuentra es más rara y
curiosa. Él es muy enamoradizo, y a primera vista ¡Ay! Sus ojitos se
vuelven corazones y con una estructura repetitiva dice aquello de: “¡Oh,
qué espaciosa, qué redondeces y qué vistosos colores!”
Todos
los animales marinos se ríen del pobre alejo por cada casa que
encuentra. ¡Jo, jo, jo! Se ríe la morsa. ¡Jugl, jugl, jugl! la ballena,
¡ji,ji,ji! Los percebes... pero Alejo no se da por vencido.