martes, 24 de julio de 2018

DISCIPLINA POSITIVA.Segunda parte.

PAUTAS PARA QUE TE ESCUCHEN LOS HIJOS/AS
FUENTE RECOGIDA DE:http://www.aprendemosconmama.com/2016/10/


Utilizar STOP y dejar de decir NO
   En vez de de decir NO con cara enfadada, se podría decir STOP, así interrumpimos el movimiento del niño. Cuando decimos NO, el niño es regañado, se siente mal, mientras que con STOP, no tiene vergüenza solo se detiene.

       Formular consignas positivas
  •    Tendemos a formular las cosas negativamente. Explicamos a los niños todo lo que no queremos que hagan y el cerebro no entiende los mensajes negativos. Por lo que si les decimos “no cruces la calle”, entenderán “cruza la calle”.
  •     En lugar de decir “No camines por aquí” mejor decir: camina por ese lado.


     Dar mucho amor

  •    Cuando los hijos no se comportan como se esperaba, los padres tienden a dejarle de lado y evitan darle besos, mientras que el amor no es una recompensa, es una necesidad.
  •    El niño necesita amor para tener un buen comportamiento. Justamente cuando tiene carencias tiene actitudes desesperadas para llamar la atención.
  •    Esto puede parecer extraño, pero cuando un niño hace un error es cuando más necesita escuchar y sentir el amor que se le da, y es así como podremos terminar con los comportamientos problemáticos.

    El cariño entre los padres y los hijos es beneficioso e indispensable tanto para la madre como para el padre y el hijo y refuerza su vínculo. Este amor compartido aporta la serenidad, la confianza y el bienestar a los tres. Cuanto más se muestra cariño al hijo, más oxitocina segrega él, y los vínculos de afecto se refuerzan y aportan el equilibrio y la felicidad en la familia, factor de desarrollo armonioso del niño. Catherine Gueguen

    Conocer las etapas de desarrollo de los hijos
  •     Por ejemplo: cuando le decimos a nuestros hijos que no toquen algo, y lo tocan pero encima se nos quedan mirando hasta incluso con una sonrisa, los padres a menudo lo interpretamos como un comportamiento insolente.
  •     Como sucede con un niño de menos de dos años y medio que no puede aún visualizar mentalmente imágenes de acción que tiene que hacer o que no tiene que hacer. Sus imágenes en ese estado son sensoriales-motrices, pasan por la comprensión de los sentidos y por la motricidad: necesita tocar, hacer gestos
  •     Observa a sus padres para verificar que lo que hace es correcto, busca su aprobación. Un niño que nos observa, mientras que va a transgredir una prohibición solamente quiere apropiarse de la consigna.

A cerca de los caprichos, son comportamientos que nosotros como padres no los entendemos. El comportamiento de un niño siempre tiene causas. Él desea crecer, desea hacer las cosas correctamente. Si no hace lo que se espera de él, puede ser que sea porque se espera de él lo que no está adaptado a su edad o la manera en la que se le piden las cosas no es la apropiada.

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